"Usted está pecadores por naturaleza." Yo recuerdo tan vívidamente este me dijo cuando yo era una niña. Los llamados buenos amigos cristianos en el país del norte de Ontario dijeron mi. También dijeron que si usted es un ateo, que ir recibió al infierno y que cualquiera que no era "nuestra" religión fue también va a ir al infierno.
Me encantaba jugar con los niños nativos de América del Norte que vivían en nuestro vecindario. Los mismos buenos cristianos me dijeron yo iría al infierno si jugaba con ellos porque eran salvajes y no tenía alma. Los peregrinos y los otros pobladores de América del Norte creían que tipo de pensamiento. Por desgracia, esas creencias persisten hoy en día.
Me gustó estar con la gente nativa, y cuando tenía unos nueve años, me dijeron que mi bisabuela era Iroquois. Oh, la vergüenza de todo! Lo que es un pecado terrible, que habría sido si alguien se enteraba!
Cuando tenía unos nueve años, nos mudamos al centro de Ontario. Ocho kilómetros de la casa no había, como se les llamaba en ese entonces, una reserva Indigena. Eso fue un poco más de una hora en mi bicicleta de cinco velocidades.
En ese momento, yo estaba intimidado por los niños blancos. Los niños nativos me aceptaron, y yo prefería estar con ellos. En la reserva Indigena, me trataron como a un igual.
Recibí mis primeras lecciones en la espiritualidad de la mujer de la medicina anciana que vivía sola en una casa antigua estación de ferrocarril casa que estaba lejos de la reserva, a lo largo de las vías del ferrocarril.
Me encantó mi casa y mi mamá y papá muy caro. Ellos eran los mejores.
Pero entre la gente de la ciudad y el pueblo del pueblo cerca de donde yo vivía, me sentí inadecuada, como un ciudadano de segunda clase. Yo era muy consciente, así que las mujeres, en general, eran considerados ciudadanos de segunda clase, pero eso era algo que era único un pensamiento irritante para mí. Yo estaba mucho más profundamente perturbado por los matones. Me hicieron sentir que no merecen, una decepción, nunca medir la altura de sus expectativas.
Como ya he aprendido la espiritualidad, llegué a saber que todo lo que vive son de igual valor e interconectado en la vida. Mira a los ojos de un niño y encontrará la pureza de la inocencia original.
Tengo mucho que se refieren a las futuras entradas. ¡Gracias!
Muchas gracias de nuevo, queridos amigos, por visitar mi blog. Por favor, comparta sus pensamientos con nosotros, si se quiere. Que tengas un gran día
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